Los CDTs, a pesar de ser un producto tradicional, siguen teniendo una muy buena acogida entre los inversionistas. Un CDT es un certificado a término fijo en el cual el cliente deposita una suma de dinero establecida en el banco y obtiene una rentabilidad que se da generalmente cada tres meses.
Concretamente, CDT es un préstamo al banco y es un producto que ofrece una gran estabilidad y seguridad al inversor, ya que su rentabilidad está asegurada, por lo que son apropiados para los inversionistas menos arriesgados.

Ventajas de los CDT
Son muchos los que consideran que los CDT no son una buena inversión y que frente a estos es preferente invertir, por ejemplo, en una cartera colectiva. Por ello, les presentamos algunas ventajas de los CDTs frente a las carteras colectivas.
- Son más estables y seguros
- Las tasas de los CDTs se ajustan a la inflación y se actualizan por periodos que la entidad financiera considere oportuno
- Existen distintas tasas en función de la entidad financiera, del plazo y de la elección de tasa variable o tasa fija
- El cliente elige dónde poner su dinero y puede saber la rentabilidad que este va a generar
- Es apropiado para aquellos que no quieren asumir riesgos y quieren manejar su dinero de forma directa
- Existe la posibilidad de negociar o endosar un CDT que aún no está vencido en caso de que se requiera de liquidez
Por otro lado, si duda entre elegir una cuenta de ahorros o un CDT debe aclarar cuáles son sus necesidades de inmediata liquidez para no equivocarse en su elección. Una cuenta de ahorros ofrece una disponibilidad inmediata del dinero depositado, de hecho, tiene acceso a su efectivo en el momento que lo desee a través de su tarjeta de débito o libreta de ahorros, y podrá realizar transferencias desde sus cuentas. El CDT, en cambio, tendrá una rentabilidad superior y lo puede utilizar como garantía para un crédito. Eso sí, si quiere liquidez tendrá que vender su título en el mercado de valores.