Cuando explico que el coste de confiscar Bitcoin es mucho más alto que el de confiscar oro, con frecuencia me encuentro con mucha gente que responde con aquello de
¡Pero estás animando a la gente a defraudar!
u otros comentarios del tipo:
¿Pero quién va a pagar las carreteras o la sanidad?
Este tipo de preguntas responden a mis planteamientos a la defensiva, como si lo que yo estuviese tratando de plantear fuese algo parecido a un ataque al Estado del Bienestar o utilizar Bitcoin como "arma" para acabar con el status quo. O como si lo que yo quisiese fuese que reine el caos y ver revueltas por todo el mundo.
Creo que Bitcoin es deseable, pero esa no es la cuestión
El choque tectónico
Ya he explicado en varias ocasiones que creo que Bitcoin es la solución al brutal problema de la presente nacionalización y zombificación de las economías occidentales y que por lo tanto no solo es útil sino deseable.
Pero aunque sea deseable ME ATERRORIZA el período de transición que existe entre el momento actual y el momento en el que ese problema sea solucionado.
Me aterroriza porque si has leído mi artículo sobre The Sovereign Individual, estoy convencido de que nuestros juicios y opiniones sobre la conveniencia de algo son absolutamente irrelevantes y lo que importa son los incentivos que tengamos en una u otra situación.
Tenemos por lo tanto una importante parte de la población que va a tener incentivos para conservar su poder adquisitivo y otra importante parte que lo que querrá es mantener el status quo (políticos, sector público, empresas protegidas por la regulación, etc...) y por primera vez los primeros van a tener una oportunidad de salirse con la suya debido precisamente a ese mucho más alto coste de confiscación.
Hasta ahora, esta especie de choque tectónico se había saldado siempre con los poderosos segundos confiscando a los primeros vía impuestos, inflación o confiscación directa (incluso a poseedores de oro físico) so pena de multa o prisión, pero por primera vez nos encontramos en una situación en la que los primeros tendrán posibilidades de salirse con la suya (aunque creo que las probabilidades son altas, obviamente se me pueden escapar mil cosas)
Cuando muchos defienden que el Estado puede confiscar tus bitcoins, obvian el hecho de que en la inmensa mayor parte del mundo los Estados son enormemente débiles, los ciudadanos tienen internet antes que agua corriente y con frecuencia esos Estados no pueden ni siquiera expulsar guerrillas, ¡Bitcoin es el menor de sus problemas!
En estos países la gente seguirá adoptando Bitcoin muy poco a poco. ¿Sabías por ejemplo que Bitcoin está en máximos históricos en una creciente parte de las divisas débiles que manejan estos países? ¿Qué impedirá, a medida que mejore el acceso a internet a toda esta creciente y ya mayor parte de la población mundial tratar de acceder a este nuevo activo para conservar su poder adquisitivo?
Y en caso de que en países como España, efectivamente se lleve a cabo esta confiscación, que ocurrirá si mientras se nos confisca a nosotros, buena parte de la población mundial sí que tiene acceso a esta revolucionaria forma de ahorro?
Lo que más probablemente ocurrirá es que o bien nos quedaremos con cara de haba sometidos mientras financiamos el que unos pocos puedan seguir capturando el valor creado por los demás o bien nos rebelaremos porque no querremos ser los únicos pánfilos del planeta que no sean capaces de beneficiarse de esta mejor manera de conservar tu poder adquisitivo.
La tensión social que creo que ya empieza a surgir en los países occidentales no hará más que crecer.
La cuestión no es si Bitcoin es deseable
Con todo esto lo que quiero decir es que si bien opino que Bitcoin es deseable, esta no es la cuestión. Tu opinión y la mía son del todo irrelevantes.
La cuestión es que si mi análisis está en lo cierto, BITCOIN ES INEVITABLE.
A mí por lo tanto no me interesa debatir lo deseable o indeseable que pueda ser Bitcoin. Puedo debatir si quieres si es preferible o no a la progresiva zombificación y nacionalización económica que estamos viviendo (acelerada por la pandemia), aunque me parecería raro que me quisieses llevar la contraria. Además ya he explicado que opino que ya ha triunfado.
Lo que a mí de verdad me interesa debatir es si crees que:
- Los individuos en el mundo no trataremos de conservar nuestro poder adquisitivo de la mejor manera posible
- Si dado lo anterior Bitcoin es la mejor manera de hacerlo
- Si aunque algunos países (como España) en el corto plazo pueden hacer la vida imposible a los poseedores de Bitcoin, es para el Estado una batalla perdida en el largo plazo teniendo en cuenta que en el resto del mundo nadie puede (y quizás ni siquiera tenga incentivos para) parar Bitcoin.
Dicho todo lo anterior, en caso de que Bitcoin efectivamente sea inevitable, ¿comprendes que me obsesione compartir mi análisis con los demás? ¿Comprendes que si te parece deseable o no es absolutamente irrelevante?
Creo en definitiva si The Sovereign Individual está en lo cierto, estamos a las puertas de cambios sociales sin precedentes y Bitcoin es seguramente uno de los más importantes catalizadores pero también la solución a que estos cambios sigan produciéndose sin consecuencias para los de siempre.
Y si crees que alguna de mis hipótesis está errada haciendo por lo tanto a Bitcoin evitable, ¡dime cuál por favor en los comentarios, quizás me convenzas y puedo conseguir que todo esto deje de ser una obsesión.
Si tras estos años de estudio estoy equivocado y se me ha pasado algo por alto estaría bien que alguien me lo haga ver :)